Asomada al mar, en el punto más meridional de Europa, Tarifa es una de las ciudades costeras con mayor proyección turística, al convertirse en el reino del windsurf.
Sus idílicas y extensas playas azotadas por el viento de levante hacen de Tarifa un lugar de culto para los aficionados a deportes náuticos como el windsurf, el kitesurf, el flysurf, el Blokar o el submarinismo, entre otros. Tras la Playa Chica, Los Lances y Valdevaqueros, se halla la Playa de Bolonia, arenal salvaje en una de cuyas zonas se puede practicar el nudismo.